Mediante un ejemplo voy a intentar diferenciar entre estos 4 conceptos:
Eugenia es usuaria del servicio de teleasistencia móvil. Vive con su compañera en Bilbo. Actualmente está de baja laboral porque está embarazada de 5 meses y pasa mucho tiempo sola. La Parálisis Cerebral Infantil por problemas en su parto le llevan a utilizar una silla de ruedas eléctrica que maneja con un jostick sin dificultad. Siempre ha sido una persona autónoma y con mucha iniciativa. Desde que ha tenido que dejar el trabajo la casa se le cae encima, duerme mal pensando en posibles problemas durante el parto y sale poco. Hoy tiene un mal día y decide hacer una llamada al servicio de teleasistencia para comentarle su preocupación.
Escena 1: APATÍA
Teleoperador: Buenos días Eugenia. Soy Pedro. ¿En qué puedo ayudarte?
Eugenia: Estoy destrozada, he dormido fatal dándole vueltas al parto. He discutido con mi pareja y estoy muy agobiada. Tengo un miedo atroz pensando que el bebe vaya a tener problemas en el parto.....¿Pedro?
Teleoperador: ...si dime...vaya, que has discutido con tu padre...
Escena 2: ANTIPATÍA
Teleoperador: Buenos días Eugenia. Soy Pedro. ¿En qué puedo ayudarte?
Eugenia: Estoy destrozada, he dormido fatal dándole vueltas al parto. He discutido con mi pareja y estoy muy agobiada. Tengo un miedo atroz pensando que el bebe vaya a tener problemas en el parto y estoy como mareada.
Teleoperador: Chica, todas las embarazadas igual. Las hormonas os hacen perder los nervios. Lo que tienes que hacer es relajarte y dejarte de historias.
Escena 3: SIMPATÍA
Teleoperador: Buenos días Eugenia. Soy Pedro. ¿En qué puedo ayudarte?
Eugenia: Estoy destrozada, he dormido fatal dándole vueltas al parto. He discutido con mi pareja y estoy muy agobiada. Tengo un miedo atroz pensando que el bebe vaya a tener problemas en .....
Teleoperador (interrumpiendo): ¡¡¡No fastidies!! que faena, lo que te faltaba, pobrecita. Ya veras cuando se entere la matrona. A mi mujer le pasaba igual. No me extraña que estés asi, no hay derecho a que pasen estas cosas y que tu pareja no se haga cargo. Encima igual el estrés y el no dormir te hace pasar factura en el peso del bebe. Que mal...pobre...Yo en tu lugar lo que haría es cantarle las cuarenta en cuanto llegue a la noche. Pero venga no llores, hablemos de cosas alegres.
Escena 4: EMPATÍA
Teleoperador: Buenos días Eugenia. Soy Pedro. ¿En qué puedo ayudarte?
Eugenia: Estoy destrozada, he dormido fatal dándole vueltas al parto. He discutido con mi pareja y estoy muy agobiada. Tengo un miedo atroz pensando que el bebe vaya a tener problemas en el parto y tengo nauseas.
Teleoperador: Vaya, lo siento. Cuéntame cómo te sientes
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