La discapacidad no solo viene dada por los factores internos de la persona, sino también por las barreras que la actitud y el entorno le añaden. En este sentido es preciso avanzar en la construcción de una sociedad en la que todos los ciudadanos y ciudadanas puedan desenvolverse plenamente; una sociedad inclusiva de todos y para todos. Para esto, es necesario, entre otros, eliminar barreras y provocar cambios de actitud, partiendo, entre otras medidas, de la introducción de ajustes razonables en el entorno que faciliten su uso, incorporando medidas que lo hagan más comprensible y amigable.
Todos nos encontramos en algún momento barreras cognitivas que nos impiden desenvolvernos con plena autonomía: señales o normas de uso inexistentes o confusas, que no resultan de ayuda, por ejemplo, para encontrar una consulta en un hospital, entender cómo usar una taquilla en un vestuario, pasar el torno de la piscina o cómo y dónde insertar la tarjeta en el autobús.
EJERCICIO: Estas dificultades que pueden presentarse a cualquiera persona son, para aquellas con problemas de comunicación, elementos añadidos que dificultan su disfrute de los servicios de la comunidad, barreras cognitivas que impiden su plena autonomía. Con el objetivo de tomar conciencia de la existencia de dichas las barreras en materia de accesibilidad cognitiva que tienen que superar el colectivo de personas con discapacidad intelectual, trastorno del espectro del autismo (TEA) o deterioro cognitivo leve (DCL) analízalas teniendo en cuenta los siguientes ámbitos que se han revelado como aquellos en los que presentan más dificultades.
SOLUCIONARIO:
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